lunes, 7 de julio de 2014

Gracias Sele, gracias fútbol

Esta semana vuelve a nuestro país la Selección Nacional de Fútbol luego de una esplendida labor en el Mundial de Brasil 2014. Sin duda es digno de felicidad ver al pueblo costarricense celebrando en las calles los ganes de nuestro equipo e inclusive hasta después de haber quedado descalificada. Ticos orgullosos por un excelente desempeño. 

Gracias Sele, gracias fútbol… ¿Gracias FIFA? Más o menos. Es posible que hayan visto recientemente un video en redes sociales que pone en evidencia muchos actos de corrupción y abusos de la FIFA. A pesar de que este video es increíblemente amarillista también es bastante cómico y muy posiblemente realista. Sin duda la FIFA es una organización que maneja muchísimo dinero y adonde hay muchísima corrupción. Pero, ¿debería ser controlada la FIFA? ¿Por qué? Claro es corrupta pero ¿acaso se financia con fondos públicos? No tenemos ningún interés de defender una organización tan evidentemente corrupta y coincidimos en que hay muchas cosas que deberían cambiar pero no vemos porque uno o varios Estados deberían regular una organización que no depende de fondos públicos. 

Pero definitivamente si vale la pena agradecer a la Sele y definitivamente al fútbol. Se han preguntado ¿por qué, si la FIFA es tan corrupta, los países se pelean para ser anfitriones de campeonatos mundiales? ¿Amor al fútbol? No, por lo menos no solamente. 

El Producto Interno Bruto (PIB) de un país es uno de los indicadores más importante para medir su riqueza. Está compuesto de varios elementos donde tal vez el más relevante es el Consumo. La economía de un país depende fundamentalmente de las millones de interacciones entre familias y empresas; venta y compra de bienes y servicios. Desde la venta de productos de consumo masivo por medio de grandes empresas transnacionales que se traducen en pago de salarios y dividendos hasta la venta de menudencias en las calles por parte de comerciantes informales. Todas estas millones de interacciones diarias sumadas forman la mayoría del PIB. 

Ahora bien, ¿qué pasaría si por un mes aproximadamente a este país llegaran cientos de miles de extranjeros para ver la práctica de un deporte? Cientos de miles (o millones) de personas que están gastando en tiquetes aéreos, hoteles, restaurantes, suvenires, ropa, abarrotes, etc. A estos cientos de miles sumémosle además un incremento significativo en el consumo de los mismos ciudadanos en actividades festivas, transporte, etc. Miles de empresas vendiendo miles de productos de más. Imagínense el beneficio de esto sobre esas empresas, sus colaboradores y todos sus proveedores. Pero no solamente empresas. Estamos hablando de pequeños restaurantes, ventas ambulantes, pequeños negocios que sostienen a tan solo una familia. Imagínense cuanto venderá de mas y que tan beneficioso será esta actividad para esta pequeña familia durante este mes. Y hasta para el gobierno. Imagínense este aumento en el consumo cuanto significaría para el gobierno en la recaudación de impuestos (sobre las ventas y rentas). Dinero que luego en parte se utiliza para pago de salarios y programas sociales. No estamos de acuerdo con que el gobierno recaude impuestos pero ese es tema para otro día; lo que queremos resaltar es que esta actividad es beneficiosa hasta para el gobierno y su recaudación. ¿Qué pasaría? ¿En cuánto creen que se incrementara el PIB y finalmente la riqueza del país? ¿Cuántas familias pobres podrían tener un respiro por lo menos durante un mes gracias a esto? 

Pero el incremento en el consumo no solo se da en el país anfitrión. Durante un mes, millones de personas de casi todo el mundo gastan mucho más en comidas, abarrotes, camisetas, etc. ¿Cuánto venderán de más durante este mes los bares y restaurantes, los supermercados, los almacenes de electrodomésticos?

Entonces, ¿valdrá la pena tener mundiales de fútbol e invertir en fútbol? Por supuesto que sí. Es tan solo un deporte, una actividad recreativa y como el fútbol hay muchas otras. Hay quienes minimizan esto al decir que se debería gastar en cosas más significativas, sin embargo, ¿son esas “cosas insignificantes”? no, si son  muy importantes. Tal vez detalles como ver un partido de fútbol o salir a cenar a un restaurante o comprarse un chocolate de vez en cuando o comprar una mascota o sacar fotografías no sean esenciales para sobrevivencia del ser humano pero no por eso no son importantes. Estas pequeñas cosas sumadas es lo que dinamiza finalmente a la economía y genera riqueza y empleos. Así funciona el mercado. Gracias Sele, por supuesto y gracias fútbol también.

Arturo Rosabal Arce

miércoles, 9 de abril de 2014

No más monopolios en Costa Rica


Por Carlos Vilchez Navamuel



Los costarricenses sufrimos durante muchos años las consecuencias de políticas estatistas y monopolísticas en la banca estatal, los seguros y las telecomunicaciones, costó años liberarse de estos monopolios que lo único que permitieron fue el beneficio de pequeños grupos llámense políticos o sindicatos sin pensar en el consumidor.

Todavía existen monopolios estatales como por ejemplo  la generación eléctrica (hoy día limitada), la que tiene Recope de importar, refinar y distribuir  al por mayor los hidrocarburos y sus derivados, monopolios que a nuestro criterio deberían eliminarse y abrirse a la empresa privada.

Para asombro de algunos, hace unos días apareció una noticia en el Diario Extra titulada “RECOPE QUIERE GAS NATURAL EN MONOPOLIO”. Esta nota informó también que la Procuraduría General de la República (PGR)  se pronunció al respecto y confirmó que “El gas natural, al no ser un derivado del petróleo, no se encuentra dentro del monopolio de Recope, por lo que otra instancia puede importarlo para su uso”.

Ahora la Refinadora Costarricense de Petróleo (Recope) en su Plan Integral de Combustibles y Asfaltos conocido como Plan B, y en su apartado destinado al análisis del gas natural  pretende “Impulsar la aprobación de una reforma del artículo primero de la Ley de la Refinería a fin de incluir la importación, transformación y distribución del mayoreo de dicho producto como parte del monopolio manejado por la empresa”.

El Plan B, dice que “Para incursionar en la importación, distribución y comercialización del gas natural requerirá de casi 5 años, que contemplará desde el momento de la licitación y adjudicación de la ingeniería básica hasta el desarrollo y ejecución de las obras del proyecto y se estima que el monto a invertir será de $104,2 millones, de los cuales $4,2 millones serán destinados en la supervisión en la fase constructiva, en caso de concretarse. El proyecto se desarrollaría entre 3 etapas. La primera consiste en la construcción de una terminal con capacidad de almacenamiento de 45.280 metros cúbicos dividido en 2 tanques de 22.640 metros cúbicos cada uno y una capacidad de regasificación de 400 mil toneladas por año”. http://www.diarioextra.com/Dnew/noticiaDetalle/227013

Y nosotros nos preguntamos ¿Por qué debemos de ceder las pretensiones de una institución que en estos momentos está cuestionada con el proyecto de la refinería con los chinos? ¿Por qué darle un monopolio a esta empresa estatal que el último año tuvo pérdidas por más de 6.000 millones de colones?                     http://www.nacion.com/economia/finanzas/Apuros-financieros-Recope-presionan-combustibles_0_1401459851.html

 ¿Acaso esta empresa nos va a garantizar a los consumidores productos más baratos?  Todo esto lo decimos porque gracias a ese monopolio que tiene Recope  hoy día los costarricenses pagamos precios exorbitantes en todos los combustibles que consumimos y gracias a eso también los costarricenses tenemos las tarifas eléctricas más altas de la región. El periódico La Nación informó a principios de año que "El precio que paga la industria costarricense por la electricidad que consume es 41% más alto que en la Unión Europea y 259% más alto que en EE.UU".  http://m.centralamericadata.com/es/article/home/Costa_Rica_Costo_de_electricidad_duplica_el_de_EEUU  

Desde ya debemos oponernos a cualquier idea monopolística estatal o privado sobre el gas natural, si Recope quiere incursionar en este campo que lo haga,  pero que lo haga al menos permitiendo que la empresa privada compita con ellos. 

Los monopolios generan corrupción, afectan los precios de los productos y servicios, no hay posibilidad de competencia y de ellos se benefician únicamente los que trabajan en estas instituciones con privilegios desproporcionados. No permitamos más monopolios en Costa Rica.

Termino este escrito con un comentario que hizo Otto Guevara Guth recientemente en su muro de Facebook, donde se refirió a este tema en particular y parafraseando a Julio María Sanguinetti, dijo que  “DONDE HAYA UN MONOPOLIO, ESTÉ DONDE ESTÉ, NO HAY LIBERTAD”.



jueves, 3 de abril de 2014

Angustias cambiarias

Desde mediados de enero del presente año, el tipo de cambio ha experimentado cambios bruscos que no son nada buenos para la economía. La inestabilidad ni la volatilidad son buenas nunca en ningún mercado.
El precio del dólar depende, al igual que el precio de cualquier otro bien, de la oferta y la demanda. Las variaciones de las Reservas Monetarias Internacionales (RMI) netas del Banco Central de Costa Rica (BCCR) engloban, en gran medida, el mercado de las divisas. Si las RMI caen es porque la demanda global es mayor a la oferta global de dólares. Las cifras demuestran que las RMI han estado cayendo en los últimos meses. Es decir, si las RMI están cayendo es porque existe una presión real a la devaluación del colón respecto al dólar.
Las causas de una caída en las RMI pueden ser varias como la aprobación del proyecto “Ley para desincentivar el ingreso de capitales externos” o la reducción del programa de “estímulo” de la FED. Sin embargo, una devaluación refleja, en última instancia, una pérdida de competitividad del país. Un gasto público creciente acompañado de un deterioro cada vez mayor en los servicios públicos, las constantes nuevas regulaciones y trabas para producir, las amenazas constantes de nuevos y más impuestos, un desprecio al emprendedor, todo lo anterior conlleva a un claro deterioro de la competitividad del país.
Pero, ¿qué hacer con el tipo de cambio? ¿Flotación administrada o bandas más estrechas? ¿Mayor transparencia en las intervenciones por parte del BCCR? Mi respuesta es: ninguna de las anteriores. Paul Samuelson, premio Nobel en Economía, quien no es muy partidario de la libertad económica, estableció en 1947 los criterios bajo los cuales se podría justificar la intervención en los mercados. El estableció que cuando un bien cumple con los criterios de “exclusión”, el mayor bienestar se logra cuando este bien opera en mercados libres y competitivos. Por ejemplo, una manzana cumple este criterio de exclusión porque quien se coma una manzana, nadie más podrá. El tipo de cambio, es decir, el dólar, cumple con el criterio de exclusión. Por tanto, según la ciencia económica un tipo de cambio libre garantizaría el mayor bienestar social.
Es típico de los Gobernantes culpar a los mercados. En Venezuela Maduro culpa a los empresarios de la escasez y en Costa Rica se culpa a los especuladores de la volatilidad del tipo de cambio. En teoría económica, el especulador cumple una función estabilizadora. Para hacer de la especulación un negocio, se debe comprar cuando hay excedentes y vender cuando hay escasez. Este comportamiento contribuye a la estabilidad de precios, no a su volatilidad. Los problemas no surgen de los especuladores sino de los gobiernos que con sus excesivas regulaciones en el mercado de divisas provocan que los cambios sean abruptos, en vez de suaves y pausados propios de mercados libres.
Sin embargo, la solución definitiva es cerrar el BCCR que ha sido un martirio, yugo, y causa de pobreza para el pueblo costarricense desde su creación. Cerrando el BCCR nos evitamos cualquier angustia cambiaria. Pero dejo el cierre del BCCR para otra entrega.


José Joaquín Fernández.