Esta semana vuelve a nuestro país la Selección Nacional de Fútbol luego de una esplendida labor en el Mundial de Brasil 2014. Sin duda es digno de felicidad ver al pueblo costarricense celebrando en las calles los ganes de nuestro equipo e inclusive hasta después de haber quedado descalificada. Ticos orgullosos por un excelente desempeño.
Gracias Sele, gracias fútbol… ¿Gracias FIFA? Más o menos. Es posible que hayan visto recientemente un video en redes sociales que pone en evidencia muchos actos de corrupción y abusos de la FIFA. A pesar de que este video es increíblemente amarillista también es bastante cómico y muy posiblemente realista. Sin duda la FIFA es una organización que maneja muchísimo dinero y adonde hay muchísima corrupción. Pero, ¿debería ser controlada la FIFA? ¿Por qué? Claro es corrupta pero ¿acaso se financia con fondos públicos? No tenemos ningún interés de defender una organización tan evidentemente corrupta y coincidimos en que hay muchas cosas que deberían cambiar pero no vemos porque uno o varios Estados deberían regular una organización que no depende de fondos públicos.
Pero definitivamente si vale la pena agradecer a la Sele y definitivamente al fútbol. Se han preguntado ¿por qué, si la FIFA es tan corrupta, los países se pelean para ser anfitriones de campeonatos mundiales? ¿Amor al fútbol? No, por lo menos no solamente.
El Producto Interno Bruto (PIB) de un país es uno de los indicadores más importante para medir su riqueza. Está compuesto de varios elementos donde tal vez el más relevante es el Consumo. La economía de un país depende fundamentalmente de las millones de interacciones entre familias y empresas; venta y compra de bienes y servicios. Desde la venta de productos de consumo masivo por medio de grandes empresas transnacionales que se traducen en pago de salarios y dividendos hasta la venta de menudencias en las calles por parte de comerciantes informales. Todas estas millones de interacciones diarias sumadas forman la mayoría del PIB.
Ahora bien, ¿qué pasaría si por un mes aproximadamente a este país llegaran cientos de miles de extranjeros para ver la práctica de un deporte? Cientos de miles (o millones) de personas que están gastando en tiquetes aéreos, hoteles, restaurantes, suvenires, ropa, abarrotes, etc. A estos cientos de miles sumémosle además un incremento significativo en el consumo de los mismos ciudadanos en actividades festivas, transporte, etc. Miles de empresas vendiendo miles de productos de más. Imagínense el beneficio de esto sobre esas empresas, sus colaboradores y todos sus proveedores. Pero no solamente empresas. Estamos hablando de pequeños restaurantes, ventas ambulantes, pequeños negocios que sostienen a tan solo una familia. Imagínense cuanto venderá de mas y que tan beneficioso será esta actividad para esta pequeña familia durante este mes. Y hasta para el gobierno. Imagínense este aumento en el consumo cuanto significaría para el gobierno en la recaudación de impuestos (sobre las ventas y rentas). Dinero que luego en parte se utiliza para pago de salarios y programas sociales. No estamos de acuerdo con que el gobierno recaude impuestos pero ese es tema para otro día; lo que queremos resaltar es que esta actividad es beneficiosa hasta para el gobierno y su recaudación. ¿Qué pasaría? ¿En cuánto creen que se incrementara el PIB y finalmente la riqueza del país? ¿Cuántas familias pobres podrían tener un respiro por lo menos durante un mes gracias a esto?
Pero el incremento en el consumo no solo se da en el país anfitrión. Durante un mes, millones de personas de casi todo el mundo gastan mucho más en comidas, abarrotes, camisetas, etc. ¿Cuánto venderán de más durante este mes los bares y restaurantes, los supermercados, los almacenes de electrodomésticos?
Entonces, ¿valdrá la pena tener mundiales de fútbol e invertir en fútbol? Por supuesto que sí. Es tan solo un deporte, una actividad recreativa y como el fútbol hay muchas otras. Hay quienes minimizan esto al decir que se debería gastar en cosas más significativas, sin embargo, ¿son esas “cosas insignificantes”? no, si son muy importantes. Tal vez detalles como ver un partido de fútbol o salir a cenar a un restaurante o comprarse un chocolate de vez en cuando o comprar una mascota o sacar fotografías no sean esenciales para sobrevivencia del ser humano pero no por eso no son importantes. Estas pequeñas cosas sumadas es lo que dinamiza finalmente a la economía y genera riqueza y empleos. Así funciona el mercado. Gracias Sele, por supuesto y gracias fútbol también.
Arturo Rosabal Arce